Pensamiento de A.Rogers (1931)
Todo lo que una persona recibe sin haber trabajado para obtenerlo, otra persona deberá haber trabajado para ello, pero sin recibirlo..
El gobierno no puede entregar nada a alguien, si antes no se lo ha quitado a alguna otra persona.
Cuando la mitad de las personas llegan a la conclusión de que ellas no tienen que trabajar porque la otra mitad está obligada a hacerse cargo de ellas, y cuando esta otra mitad se convence de que no vale la pena trabajar porque alguien les quitará lo que han logrado con su esfuerzo, eso... mi querido amigo...
...es el fin de cualquier Nación.
“No se puede multiplicar la riqueza dividiéndola”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Ok. Sigamos tu linea de pensamiento y cerremos las escuelas públicas, los hospitales públicos y no paguemos más a los jubilados. Por qué pagar educación, sin recibir nada a cambio?? para qué curar si no me pagan?? para qué pagar a quienes no producen???. Sin principio de solidaridad no hay Nación posible, querida Marta. Ah, y me olvidaba, sólo arreglemos los caminos con peajes o aquellas cuadras en donde nos aseguremos que todos los vecinos pagan los impuestos. Te doy si me das, sino... minga!!!
La divisiòn de la riqueza tal la expresa Rogers, nada tiene que ver con los beneficios para trabajadores o trabajadores jubilados o sus familias.
La ruta seis a lujan, no tiene peaje aparentemente, por lo tanto no la vigilan, ni la arreglan, es tierra de nadie... en eso tenès razòn y parece que siguen esta lìnea de pensamiento a pesar de publicar lo contrario.
En mi humilde opinión, creo que la riqueza que ha sido acumulada por un individuo o una familia con un trabajo honrado... esa debería ser intocable. Pero aquella que ha sido acumulada mediante practicas dolosas, esa debe ser expropiada en beneficio de la comunidad. Ofrezcamos un trabajo digno a cada persona y si ésta no quiere aceptarlo allá ella con las consecuencias... Es aquí donde falla nuestro sistema de Gobierno hoy en día en todas la naciones del mundo. Libertad Sí, pero, como dijo Lenín: Pera hacer qué...?
Publicar un comentario